La disfunción eréctil (DE) y las enfermedades cardiovasculares comparten factores de riesgo comunes, como la obesidad, el tabaquismo, el colesterol alto, la presión arterial alta y la falta de ejercicio. La disfunción eréctil puede ser un signo temprano de enfermedad cardíaca porque los problemas con el flujo sanguíneo afectan la función eréctil. Esta es la razón por la que los hombres que padecen disfunción eréctil deben acudir al médico para que los controlen en busca de enfermedades cardíacas.